Como red centrada en la privacidad, Tor está constantemente expuesta a una amplia gama de amenazas que pretenden socavar su seguridad y funcionalidad. Para luchar contra estas amenazas, Tor emplea una variedad de sistemas de mitigación de amenazas diseñados para proteger la red de actividades maliciosas, tanto de naturaleza técnica como social.
Estos sistemas son cruciales para preservar la seguridad y fiabilidad de la red Tor, permitiendo que siga funcionando como una herramienta segura para usuarios de todo el mundo. Mediante la combinación de salvaguardias técnicas, la colaboración de la comunidad y la innovación continua, Tor trabaja activamente para detectar y hacer frente a las amenazas antes de que puedan causar daño.